Elemento Tierra / Bazo en MTC

Otro de los órganos que consideramos muy importantes  es el Bazo. Realmente TODOS lo son, pero este órgano es un tanto especial e incluso hay una vertiente en Medicina Tradicional China que sujeta la teoría de sacar este Elemento Tierra del ciclo de los 5 movimientos, tratarlo como el centro de los 4 elementos restantes y tratar todos los desequilibrios desde el centro para que los otros órganos se auto-regulen. En www.bienestarvalencia.com nos parece lógico que sea tan importante, porque está fuertemente vinculado con la alimentación y consideramos que esta es crucial para una buena salud y calidad de vida. Y no solo para esta vida, sino para las futuras, las que queremos crear cuando queremos gestar a un bebé. Además este órgano se sitúa justo en el centro de nuestro cuerpo y coordina el paso de los líquidos y nutrientes. Por eso se dice en MTC que el Bazo transforma y transporta. Transforma los alimentos, les saca los nutrientes y los transporta, los lleva donde tienen que llegar.  Es como la madre que nutre y entrega los frutos de su producción. Representa el hogar, el centro y es por eso que está conectada con los 4 elementos.

En las entradas anteriores sobre el elemento Agua o Riñón hablábamos de la Esencia, como energía preciada y transmitida de nuestros ancestros (en fin, nuestros padres). En MTC la Esencia también se puede llamar la raíz del cielo anterior. En el Elemento Tierra el bien preciado es adquirido por la comida. Aquí el Bazo se considera la raíz del cielo posterior, por ser además el órgano principal en la creación de Qi y Sangre. Su color está representado como el amarillo, el sabor dulce, la estación es el fin de verano o los 20 días iniciales de cada estación, su sentido es el gusto y su clima es el húmedo. Su fluido es la saliva, su orificio la boca y se manifiesta en los labios. Además el Bazo está relacionado con los músculos a nivel físico y el intelecto a nivel mental.

La Tierra nos provee de nutrientes, nos da soporte, sustento y estabilidad, nos conecta con nosotros mismos. Así pues una tierra equilibrada nos dará autoconfianza, seguridad, pero también simpatía y estar centrado y contento con uno mismo. Si nos falta el sustento de la Tierra desarrollaremos actitudes inquietantes como son la obsesión o los pensamientos obsesivos, la preocupación constante, la falta de autoconfianza y por ende la falta de independencia y estabilidad.

Además el Elemento Tierra es el elemento del tacto, del contacto físico. Por consecuencia los masajes, las terapias con contacto físico en general, pero también trabajar la tierra o hacer trabajos manuales son muy agradecidos por este elemento. También el hacer ejercicio al aire libre y estar en contacto con la naturaleza en general.

 

El elemento Tierra como centro de nuestro organismo

Como habíamos mencionado anteriormente es uno de los principales órganos para la producción de Qi y Sangre. Una parte de la energía pura de los alimentos va hacia los Pulmones para formar el Zong Qi, la energía torácica. Otra parte va hacia el Corazón para allí formar junto con el Pulmón la Sangre. La parte más impura va hacia los intestinos. Si el Elemento Tierra funciona bien las digestiones serán buenas, el apetito normal, igual que el movimiento peristáltico e intestinal, las heces estarán bien formadas y el flujo de los líquidos será correcto. A lo contrario habrá malas digestiones, flatulencias, distensión abdominal, apetito irregular (demasiado o falta de él), heces pastosas o sueltas o habrá retención de líquidos o formación de Humedad o Flema (grasa, quistes, leucorrea, embotamiento de la cabeza, enfermedades reumáticas,…).

El Qi de Bazo tiene que ascender para mantener los órganos en su lugar y retener la sangre dentro de los vasos sanguíneos. Síntomas de la falta de ascenso serían por ejemplo prolapsos o bien uterinos o rectales, pero también hemorragias (menstruales también). Otra señal que el Qi deja “caer” serían también diarreas y hipotensión. La energía de Estómago por lo contrario tiene que bajar, para que los alimentos se puedan digerir y tener un tránsito descendente hacia los intestinos.

Como habíamos mencionado anteriormente el Bazo es el intelecto. Esto incluye que es el que nos da la capacidad para reflexionar, pensar, concentrarnos, estudiar, memorizar y procesar la información. A nivel emocional es el que nos da la capacidad de dar y recibir soporte y afecto. El Bazo es como la madre que nos nutre y nos protege. A veces confundimos la necesidad de afectividad con la necesidad de comer (p.ej. en trastornos alimentarios). Y también estar muchas horas sentados ejerciendo un trabajo mental fuerte puede debilitar la energía de este elemento. En los trastornos de Bazo frecuentemente aparece hinchazón abdominal, como si la persona estuviera embarazada, emulando así a la madre tierra. Así pues la nutrición no depende tanto de la materia, sino de lo que absorbemos. Para ello nuestra actitud frente a la comida tiene que  ser positiva – así nuestro cuerpo lo agradecerá absorbiendo bien los alimentos. Además es importante que no estemos ni preocupados ni tensos a la hora de comer. Hay que dejar la tele, el trabajo, los problemas y preocupaciones a un lado. Un buen consejo sería hacer una mini-meditación antes de comer, haciendo por ejemplo simplemente unas respiraciones y cerrando durante 1 minuto los ojos. A parte del aspecto mental es importante masticar bien la comida. Los hidratos de carbono empiezan su digestión en la boca uniéndose con la amilasa de la saliva, pero también la lipasa para digerir las grasas. Si no se mastica bien, le damos más trabajo al Bazo y también al Estómago para digerir los alimentos y por consecuencia necesitaremos un gasto energético mayor. Una manera de no diluir los jugos gástricos es no beber demasiado durante las comidas. Es bueno beber un vaso de agua caliente por las mañanas en ayunas para tonificar Bazo. Si durante las comidas nos limitamos a un vaso pequeño de agua, o mejor aún una infusión de té verde, ayudaremos a hacer mejor las digestiones. Se dice que el té verde, junto con el limón recién exprimido y la canela tienen la capacidad de reducir el índice glucémico de las comidas.

El Bazo detesta el frío ya que consume mucho calor de su fuego digestivo. Además prefiere cenas ligeras y cómo mínimo 3-4 horas antes de acostarse. Pero tampoco le gusta mucho los ayunos prolongados. Como podemos imaginarnos donde no hay alimento, no hay nutrientes y no se puede producir ni Qi ni Sangre.

En una sociedad repleta de dulces y salados podemos ver fácilmente los efectos negativos del exceso de dulce. Pero no hay que confundirlo con el sabor dulce que podemos encontrarlo en las frutas, la calabaza asada, los frutos secos – en fin, los dulces naturales. Estos pueden ayudar a tonificar el Qi y la Sangre en cierto grado. Realmente casi todos los alimentos tienen en mayor o menor grado el sabor dulce. El sabor dulce es Yang y por eso tonifica y refuerza, armoniza el centro, pero en exceso lo debilita, como ya habíamos mencionado, y también dispersa la energía de Corazón. El dulce promueve la producción de líquidos internos que también son parte de la sangre. El dulce tonifica la parte Yin de Pulmón, así pues si hay tos seca podemos utilizar el dulce (p.ej. una cucharadita de miel) para humedecer, pero si hay tos productiva con mucha flema, no será lo más adecuado. Como el dulce tiene energía ascendente puede producir cefaleas, acné, etc. pero también ralentiza los procesos (de putrefacción como se puede constatar en las mermeladas). La ansiedad por lo dulce puede estar ocasionado por un exceso de sal. Desde el punto de vista de la medicina tradicional china la sal disminuye los líquidos internos y para compensar intentamos humedecer con dulces.

En la próxima entrada hablaremos más específicamente sobre como podemos tonificar el centro con la alimentación. ¡Pincha aquí y descubre como hacerlo!

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