La terapia con fármacos citotóxicos inhibe el desarrollo de células cancerosas. Desafortunadamente, al mismo tiempo destruye el cuerpo, debilita el sistema inmunológico y puede provocar anemia.
Los problemas gastrointestinales también aparecen durante la quimioterapia. Esto interfiere con la absorción de nutrientes y puede conducir a graves deficiencias de nutrientes. Dado que cada organismo reacciona de manera diferente a los medicamentos citotóxicos, la dieta durante su ingesta debe hacerse individualmente. Sin embargo, después de la quimioterapia, es necesario comenzar rápidamente a reponer las deficiencias nutricionales y garantizar la regeneración del cuerpo agotado por el cáncer y la terapia.
Columna vertebral de proteínas
La regeneración más rápida del cuerpo la proporciona una dieta rica en proteínas fácilmente digerible. El paciente debe consumir 100-120 g de proteína al día. Contiene un total de, por ejemplo, 2-3 tazas de leche desnatada, 100 g de requesón bajo en grasa, 15 g de carne y pescado, 50 g de carne magra, así como huevos y 300-350 g de cereales. productos: pan, cereales, pasta, arroz.
2/3 de la proteína debe ser de origen animal, ya que contiene los aminoácidos necesarios para la construcción y reconstrucción de tejidos, anticuerpos, hormonas y enzimas.
El pescado marino es especialmente importante no solo como fuente de proteínas, sino también de omega-3 (EPA, DHA), que ayudan a combatir las células cancerosas. La investigación científica confirma que los EFA (ácidos grasos insaturados): alquilgliceroles, escualeno, EPA y DHA (presentes en el aceite de pescado marino) pueden aumentar la eficacia de la terapia contra el cáncer. Gracias a ellos, las células cancerosas responden mejor a los fármacos citotóxicos y el organismo se recupera más rápido durante la quimioterapia.
Vale la pena beber leche descremada todos los días. También puedes añadir yogur natural y kéfir. Contienen menos lactosa (que suele ser la causa de la diarrea) y bacterias probióticas que aumentan la inmunidad.
Para aumentar la cantidad de proteína en la dieta, se recomienda usar leche en polvo para sopas y salsas. Vale la pena añadir clara de huevo a las albóndigas o albondigas, y queso homogeneizado a las ensaladas y postres.
El paciente debe tener 4-5 comidas pequeñas por día, preferiblemente en horarios fijos. Las porciones pequeñas no sobrecargan el tracto digestivo y el estómago digiere los alimentos más fácilmente. Los descansos entre comidas no deben exceder las 2-3 horas. Se requiere cenar 2 horas antes de acostarse.
También es importante beber al menos 2 litros de bebidas a lo largo del día. Se recomienda suero de leche, suero de leche, té suave y granos de café, jugos de frutas y vegetales y batidos.
Vitaminas y minerales
El paciente debe comer al menos 1/2 kg de verduras y frutas. Contienen, entre otras cosas, vitamina C, E y betacaroteno, que son valiosos antioxidantes, protegen contra los radicales libres, favorecen la curación y previenen significativamente la recurrencia de la enfermedad.
Las verduras y las frutas también son una fuente de vitaminas que mejoran el estado de ánimo . También contienen minerales: calcio, fósforo, hierro, magnesio, potasio. Se recomiendan verduras jóvenes y jugosas, como zanahoria, calabaza, remolacha, apio, perejil, tomates pelados, escorzonera, espárragos, lechuga. Lo mejor es cocinarlos al vapor o en agua con la adición de grasa. También debe comer frutas maduras y jugosas: bayas, cítricos, escaramujos, melocotones, albaricoques, plátanos, uvas sin semillas, así como manzanas al horno y hervidas.
Breve resumen
Columna vertebral de proteínas | La regeneración más rápida del cuerpo la proporciona una dieta rica en proteínas fácilmente digerible. |
Vitaminas y minerales | El paciente debe comer al menos 1/2 kg de verduras y frutas. |