El peso se detiene: entreno, pero no pierdo peso. ¡¿Qué hacer?!

Cuando hacemos ejercicio regularmente y seguimos una dieta, queremos ver una disminución semanal en los números en la balanza. Pero sucede que el peso se detiene y no está claro dónde está el error …

El error más común son las comidas “accidentales”

Nos parece que comemos bien y con moderación, pero no nos damos cuenta de cómo nos comimos un dulce de más o cómo nos comimos todas las galletas mientras veíamos la televisión. Las comidas descontroladas nos ralentizan en el camino hacia la pérdida de peso y el peso se detiene.

Solución: lleva un diario de comidas y anota todo lo que comes durante el día, cada caramelo y chuleta. Piensa tu dieta con antelación: 3 comidas principales y 2 meriendas. Para el desayuno, es mejor cocinar platos de carbohidratos complejos y proteínas, para el almuerzo también carbohidratos, proteínas y verduras, pero para la cena solo proteínas y verduras. Los bocadillos pueden ser frutas, frutas secas, nueces, requesón, miel.

Error #2: Te saltas el desayuno

Muchos se saltan el desayuno: a algunos no les gusta desayunar, otros no tienen tiempo, otros se limitan a una taza de café. ¡En vano! El desayuno es la comida principal del día. Las personas que desayunan por la mañana tienen un mejor metabolismo (metabolismo), se sienten mejor, aumenta su capacidad de trabajo, estado de ánimo y concentración. Si el cuerpo no recibe el conjunto necesario de sustancias para el desayuno, por la noche es posible un colapso y comer en exceso. El desayuno es tu energía para todo el día.

Solución: para tener tiempo para desayunar por la mañana, prepare “productos semielaborados” por la noche. Puede ser, por ejemplo, avena “perezosa”, ingredientes para batidos que son fáciles de mezclar en una licuadora y beber, huevos cocidos con verduras, budín con semillas de chía.

Error #3: No bebes suficiente agua.

El cuerpo humano es 70% agua. La norma de agua para un adulto es de 1,5 a 2,5 litros. Gracias al agua, los procesos metabólicos se aceleran en el cuerpo, las grasas se descomponen. Con la falta de líquido, el cuerpo lo almacena y, como resultado, obtenemos un aumento en el peso corporal.

Solución:  si tiene hambre, intente beber agua. Y asegúrese de beber un vaso con el estómago vacío por la mañana.

Error #4: No duermes lo suficiente

¿Crees que el sueño no está relacionado con la pérdida de peso? Esto no es verdad. Si no duerme lo suficiente, entonces el cuerpo está en un estado de estrés, el sistema nervioso funciona mal, el cerebro no descansa y los músculos están en tensión. En momentos de estrés, a menudo desea comer algo dañino. Debido a la falta de sueño, el cuerpo no tiene suficiente tiempo para recuperarse y producir hormonas para el metabolismo normal, por lo que el peso se detiene o incluso aumenta. 

Solución: organiza el régimen para que duermas de 7 a 9 horas al día. El cuerpo te lo agradecerá.

Error #5: Adaptarse al régimen (efecto meseta)

El efecto de meseta es cuando el cuerpo se ha adaptado completamente al régimen de entrenamiento y también cuando la cantidad de calorías consumidas es igual a la cantidad de calorías perdidas. Ahí es cuando el peso se detiene. Tal vez esté siguiendo una dieta estricta y su cuerpo haya perdido agua rápidamente, quemado la grasa recién formada y ahora necesite aún más ejercicio. El efecto meseta también puede ocurrir con monodietas.

Solución: revisar la ingesta de calorías y reducirla (pero no más de 200 kcal por día). Puedes hacer días de ayuno una vez a la semana para sacudir el cuerpo. En el entrenamiento, también es mejor hacer ajustes, por ejemplo, agregar un par de cargas cardiovasculares. Visite la sauna después del entrenamiento de fuerza y ​​su cuerpo entrará en el modo de acelerar los procesos metabólicos.

Por lo tanto, antes de desesperarte de que el peso se detenga, reconsidera tu enfoque de estos puntos. Probablemente te reconocerás en algunos de ellos, pero ahora ya sabes qué hacer. ¡Atrevimiento!

Breve resumen

El error más común son las comidas “accidentales” Nos parece que comemos bien y con moderación, pero no nos damos cuenta de cómo nos comimos un dulce de más o cómo nos comimos todas las galletas mientras veíamos la televisión.
Error #2: Te saltas el desayuno Muchos se saltan el desayuno: a algunos no les gusta desayunar, otros no tienen tiempo, otros se limitan a una taza de café.
Error #3: No bebes suficiente agua. El cuerpo humano es 70% agua.
Error #4: No duermes lo suficiente ¿Crees que el sueño no está relacionado con la pérdida de peso? Esto no es verdad.
Error #5: Adaptarse al régimen (efecto meseta) El efecto de meseta es cuando el cuerpo se ha adaptado completamente al régimen de entrenamiento y también cuando la cantidad de calorías consumidas es igual a la cantidad de calorías perdidas.